Poco a poco me acerque. Sin saber como, su luz me atraía, y cada día más y más. Tenía miedo, mucho miedo, y sin saber porqué, me arriesgue, me metí en su juego. Una voz en mi cabeza me decía que parara, que estaba jugando con fuego. Pero esta vez no quise hacerla caso.
Oculté esa voz que me hablaba y seguí adelante, había mucho que perder, pero no me importaba, por una vez iba a actuar sin pensar. Y sin embargo pensé más que nunca. Tanto que hice que esperara un mes.
Y entonces, cada vez me hice más participe del todo, era como un hermoso cuento: prados, cariño y princesas y caballeros. Y me encantaba.
Y un día, reaccioné y pronto mi cuerpo se encontró encima del suyo. Mi respiración se aproximó a su cuello, el cual se estremecía debajo de mí,despacio, sin prisa, dejé reposadamente que mi aliento penetrara en cada poro de su esbelta piel, se me abrió suevamente, nerviosa pero disfrutando,me deslicé por todo su cuello sin apenas rozarla y entonces mi respiración dejó paso a mis labios y después a mis dientes en el bocado más placentero de la historia. Después mis labios buscaron los suyos.Nos miramos, temblorosos, tímidos y torpes. Y nuestros labios se encontraron como llevaban tiempo deseándolo.
Y desde entonces no he dejado de ver la luz, cada día más y más brillante.
Por mucho que intente expresar todo, sé que todo lo que se diga se quedará corto para explicar lo que siento, cada día tengo más claro que te has quedado dentro de mí, en el mejor sitio de mi corazón y que no voy a sacarte de allí. Me iluminaste, llegaste a mi en el peor momento y me rescataste. Y te lo agradeceré
una y mil veces aunque no quieras que lo haga.
Llevamos 6 meses escribiendo el cuento más bonito de la historia. Ese cuento que no quiero que tenga final de momento.
Pues quiero seguir amandote como nunca te han amado.
Pues quiero besarte y abrazarte tanto hasta que seas la persona más feliz de la Tierra
Y quiero ser tu luz, esa que te guíe hasta el paraiso y la felicidad.
Porque te amo con locura y no voy a parar de repetirlo.
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