viernes, 31 de diciembre de 2010

Feliz año nuevo

En Enero, la novedad.
En febrero, el desencanto.
En marzo, la cueva.
En abril, la esperanza.
En mayo, la luz.
En junio, la espera.
En julio, el amor.
En agosto, la pasión.
En septiembre, la amabilidad.
En octubre, el cambio.
En noviembre, la tranquilidad.
En diciembre, la alegría.

Sin duda ha sido un año lleno de contrastes,  momentos pesimos y momentos estupendos, depresión y felicidad, oscuridad y luz.
Todavía recuerdo como empezó enero con ilusión, novedades y sonrisas, pero acabó con muerte y tristeza. Pero había que reponerse y en febrero la precipitación hizo sus estragos y me embarqué en aquella aventura que me traería desilusión y que en marzo me daría una dulce patada en la boca. Y desde entonces aparecieron la oscuridad y el llanto en la cueva, las lágrimas de un lobo herido que se había marchado para poder sanarse. Pero en mayo apareció la luz, una brillante luz que llevaba tiempo frente a él y desde entonces salió a la superficie. Y mayo además trajo la declaración y mi negativa y con ello la larga espera de junio, y los paseos, y el estudio. Y en julio el año se hizo año y comencé a vivir en mis sueños, con esa hermosa luz que emites cada minuto. Y desde entonces he comenzado a vivir, a disfrutar de este año hasta hoy. Y a pasar el mejor verano de mi vida. Y octubre trajo el cambio, el caos, y noviembre la estabilidad, el llanto y el agobio, un agobio que se prolongo hasta diciembre que también trajo alegría, paraíso y como siempre tus sonrisas.

Solo espero que el año que viene la luz siga brillando como lo lleva haciendo hasta ahora y que en 2011 haya también grandes momentos de alegría como los de este año. Gracias a todos los que me han acompañado este año.
Feliz año nuevo.

viernes, 24 de diciembre de 2010

Feliz Navidad

Ya es navidad.
Las calles se inundan de luces y canciones que nos recuerdan lo hermoso que son estas fechas: belenes, puestecillos, cenas navideñas, cenas familiares, reencuentros, uvas, regalos y un largo etcetera.

Desde hace ya un mes las televisiones nos brindan con sus maravillosas películas de estas fechas, en las que la típica familia rica estadounidense celebra la navidad en amor y compañía y solucionan un conflicto que se les presenta de improviso, justo antes del 24. Los centros comerciales se engalanan y nos amenizan con hermosos villancicos que parece que cantan la orquesta  de Viena.Los reyes dejan los regalos bajo el arbol y las caras de los niños se llenan de ilusión. Todo el mundo respira paz y alegría, todos se reúnen para cenar y se acuerdan de sus seres queridos. Sí, la navidad es genial...

Hasta que creces y te das cuenta de que la navidad apesta.
Todos los años nos repiten las mismas películas en Navidad en las que un mozuelo macaulay culkin realiza sus travesuras ante unos inexpertos ladrones antes de darse a las drogas.
Los centros comerciales nos invitan al consumismo con sus grandes ofertas del 2x3 y esos precios hinchados hasta la saciedad pero que nadie mira ya que todo el mundo necesita comprar algo como sea. Sea lo que sea, les da igual, necesitan comprar algo y lo necesitan ya porque han sido tan poco previsores como para comprar con adelanto. Y mientras aquí ocurre eso, en el otro lado del mundo la gente se muere de hambre, ellos si que chuparian las cabezas de las gambas y hasta se comerían  las cascaras de los mejillones.

Y de vuelta aquí las familias se reunen en amor y compañia para...tirarse los trastos a la cabeza y sacar los trapos sucios. Si por algo no se veían en todo el año, entonces ¿por qué ahora? Porque es navidad, una fiesta de estúpidas tradiciones hasta para los más ateos. No hay nada peor que una cena de navidad, tu tío comienza a criticar sutilmente mientras tu tía y tus primos observan tu casa  con recelo como restregándote que su chalet es mil veces mejor(pues si tan grande es entonces cenemos todos allí)y entonces un comentario hace comenzar una discusión mientras los niños se tiran el pan y el abuelo comienza a pelar una gamba, poco después la discusión comienza a subir de tono y se empiezan a involucrar mas personas. Finalmente todo el mundo comienza a gritarse mientras los niños ahora juegan a la videoconsola en otra habitación y el abuelo... continúa pelando la gamba.
Finalmente todo se tranquiliza y todos se desean feliz navidad y esperan volver a encontrarse un año después para volver a tirarse los trastos a la cabeza.

Si, todo es estupendo en estas fechas de falsedad y consumismo.
Feliz navidad.

lunes, 20 de diciembre de 2010

Crónica

El expocomic de este año ha sido sin duda uno de los mejores. O al menos para mí.
Esta vez cambié los hábitos para ir. En lugar de levantarme, hacerme un bocata rápido y quedar en el lugar de siempre, nos levantamos, hicimos la comida, desayunamos y cogimos el tren. Y allí la alegría continuó durante horas.
Pese a que no estábamos todos los que deberíamos estar, a que la organización de algunos asuntos dejaba mucho que desear,  a que no estaba Lydia presentado y a que no encontré algo decente que comprar por un módico precio, fue algo fantástico.

Paseos, garras, orejitas, sonrisas, besos, cosplay, gorros mokonudos, karaoke y tú iluminando aún más el único lugar donde ser diferente no importa.
Al igual que iluminaste uno de los fines de semana más cortos del año.
Aquel que llevábamos mucho tiempo planeando.

Y pese a que al principio todo se trastocó y tuvimos que cambiar un poco nuestros planes iniciales...me encantó pasear por el silencio y la tranquilidad, me encantó saborear el néctar más delicioso de la historia y me encantó visitar de nuevo el paraíso y en él, ver explotar a toda tu belleza cual torrente de majestuosidad.
Mostrando lo que nunca te atreviste a mostrar, tomandomelo con tranquilidad para hacerte viajar por los nubes, haciendote soñar con que el cielo existe, mostrandote que la relajación y la felicidad te las puedo conseguir en tan solo 2 metros cuadrados.
Y haciendo que brote la magia entre nosotros, hasta que  buscaste mis brazos para fundirte en el más especial de los abrazos.
Y al despertar tu rostro seguía ahí para ponerme una sonrisa en la cara al amanecer.
Y de nuevo, el tiempo en la burbuja se hizo corto, como siempre que nos aislamos en ella.

Y hoy deseo que estas fechas no nos agobien mucho y que podamos seguir metiéndonos en nuestra burbuja, que podamos seguir viendo el amanecer, que paseemos por esas calles donde no hay nadie y que sigamos subiendo al paraíso.
Porque no hay visión que me guste más que la tuya allí.

martes, 14 de diciembre de 2010

Sueños II

Lo intento, lo intento, lo intento...pero no lo consigo.
Me esfuerzo, intento poner una sonrisa es mi rostro, me intento llenar de optimismo pero en cuanto me paro un momento a pensar, todo se viene abajo.
Y no doy a basto.
Hace un rato me puse a recordar...

Como cuando era un niño sabia soñar pese a todo, como era sentir la ilusión por cualquier cosa...
Pero ya no es así, poco a poco la ilusión por soñar se ha ido perdiendo y recuerdo...como me han fastidiado todas las fechas importantes de la vida de un niño, como era difícil hasta respirar, como no había palabras de cariño.
Y poco a poco se pierde la ilusión por soñar y cunde el desanimo. Y justo cuando estaba más ilusionado con algo, cuando encontré un nuevo rumbo para mi vida: alguien lo fastidió.

Y ahora me encuentro aquí, desanimado, harto de estudiar, deambulado entre los caprichos del destino, desplazado, despreciado, sintiéndome un inútil e intentando recordar de que se componían los sueños.
Porque quiero intenta seguir haciéndolo, abrir los brazos y alcanzar aquellos sueños que solía pasear por mi mente no hace mucho tiempo.
Porque soñar es libre hasta que alguien te impide hacerlo.
Por suerte, aún puedo soñar con la princesa. Y eso, nadie, salvo ella, me lo puede impedir.

jueves, 9 de diciembre de 2010

Desgana

No puedo. No quiero.
Agobio, falta de motivación, cansancio, sueño, enfado, caos. Tristeza.
Desgana.
Ahora mismo no tengo ganas de estudiar ni de hacer nada, no tengo ganas de continuar y no sé porqué, incluso con todo, hace tres semanas podía pensar que estaba motivado, que debía hacerlo e incluso quería hacerlo.
Pero no. Quiero tumbarme en la cama, llorar y llorar de impotencia, escuchar música y dormir. Como muchas veces a lo largo de mi vida.
Y encima se acerca la navidad.
Estoy cansado, bajo de moral, necesito un abrazo, un apoyo, una sonrisa y fuerza.

Y encima hoy es 9 de noviembre.
Y aún te recuerdo paseando a mi lado alegre y feliz.
Y aún recuerdo como hablabas despreocupada y reíamos de temas banales.
Y aún recuerdo la fuente, el parque, las fotos, el frío y el catarro.
Y el comienzo.

Pero todo eso ya no importa, solo son recuerdos y por tanto, pertenecen al pasado.
No tengo ganas de recordar.
No tengo ganas de poner la buena mejilla.
Simplemente quiero  tranquilidad, relax, amor y sosiego. Y que se pase la navidad lo antes posible.
No tengo ganas de seguir sonriendole a todo el mundo pese a que no quiera.
Desgana.
Desgana...

domingo, 5 de diciembre de 2010

5 de diciembre

En la fría noche de otoño el lobo poco a poco va cayendo en un profundo sueño.
Las finas sábanas cubrirán su piel y una mano cálida le volverá a visitar para acariciarle la cabeza. Y esta noche en su mente los recuerdos estarán más vivos que nunca.

Recordará cuando negó el amor a su princesa la primera vez que pasearon a solas.
Se acordará de aquella primera tarde en la que la abrió su burbuja para descubrir un mundo nuevo.
Evocará la primera vez que la dio un suave mordisco en su perfecto cuello de cisne, haciendose de rogar, dejando que su respiración rozara su piel antes de dejar paso a su boca y sus dientes.
Se estremecerá al recordar su primer amanecer juntos, el primero de muchos.
Volverá a sonreír al sentir como se paraba el mundo la primera vez que ella le dijo "te quiero".

Pero sobre todo deseará no despertar, no volver a la cueva pues ahora el quiere seguir soñando.
Porque ella le curó las heridas cuando más lo necesitaba.
Porque ella es la princesa de su frágil reino de marfil.
Porque ella le hace flotar por el cielo.
Porque cuando se encierran en su burbuja no importa nada más.
Porque es tan hermoso estar entre sus brazos que a veces piensa que no puede ser real.
Porque sus sonrisas de cariño son la visión más maravillosa del mundo.
Porque por ella haría cualquier cosa.
Porque sus besos le estremecen.
Porque sus abrazos le hacen vivir.
Porque aunque lleven cinco meses su corazón todavía se acelera al oír  un "te quiero"

Este lobo lleva los cinco meses más maravillosos de su vida.
Princesa, gracias, este pequeño lobo no tiene palabras para describir lo siente.
Simplemente te amo.
Y quiero seguir haciéndolo, mucho, mucho, mucho.